Hermann Hesse

 

El lobo estepario 

Un familiar de la casera de Harry Haller nos describe al lobo estepario, quien al final le dona las anotaciones que él publica. Un manuscrito con la siguiente introducción, recurso sencillo del autor para meternos el cuento:

“Hubiera tirado con indignación éstas hojas, si hubiesen caído en mis manos y su autor no me hubiese conocido” “(…) no la quimera de un solo individuo, sino la enfermedad del siglo mismo, la neurosis de aquella generación a la que Haller pertenece, enfermedad de la cual no son atacadas sólo las personas débiles e inferiores, sino precisamente las fuertes,” 

Las anotaciones están escritas en primera persona por H.H. tan similar al nombre del autor, muy autobiográfico, salido de su reciente separación, de su rechazo a la guerra y unido a la amistad de Tomás Mann.

 “Lo que para mi es delicia, suceso, elevación y éxtasis, eso no lo conoce, ni lo ama, ni lo busca el mundo” 

“Entonces es verdad que estoy loco, entonces soy efectivamente el lobo estepario que tantas veces me he llamado la bestia” 

Son sus iniciales anotaciones, sólo para locos por el siglo desmembrado, chocando en sus nuevas contradicciones. 

“El Jazz me producía aversión, pero me era diez veces preferible a toda la música académica de hoy” (…) llegaba con su rudo y alegre salvajismo” (…) Naturalmente que comparada con Bach y con Mozart y con música verdadera, era una porquería” 

Propiamente en el tratado del lobo estepario nos cuenta y describe ese hombre lobo cómo se considera. Pero sus apuntes son también, sólo para locos. 

“El hombre poderoso en el poder sucumbe; el hombre del dinero, en el dinero; el servil y el humilde , en el servicio; el que busca el placer en los placeres” 

“Mientras que él, seguro de su navaja de afeitar, se despedía de todos los dolores y cerraba la puerta tras de si” 

Su obsesión con la navaja es un tema que desarrolla sobre el suicidio:

“ la fuerza vital de la burguesía no descansa en modo alguno sobre las cualidades de sus miembros normales, sino sobre las de los extraordinariamente numerosos outsiders” 

La única forma de imponerse a todo es mediante el humorismo. Porque la persona de H.H. está compuesta por innumerables seres, millares de yos. 

“Todo lo cobarde , todo lo simio, todo lo estúpido y minúsculo, como no sea muy directamente lobuno, lo cuenta al lado del “hombre”, así como atribuye al lobo todo lo fuerte y noble sólo porque aún no consigue dominarlo” 

Lo importante y definitivo para el lobo estepario, no era cometer el crimen, sino poder llegar a reír en el teatro mágico solo ensuciado por sus manchas de realidad. Allí estaban todas sus caras, sus rostros, su cultura su interior, todos sus preferidos inmortales con Mozart y esa forma del tiempo llamada música. 

Lo demás eran pretensiones, ilusiones de pensamiento y saber, falsa erudición y eterna contradicción: El interior de ese teatro era sus propia introspección. 

Si, ese libro que a veces leímos con premura, prefiriendo otras urgencias, era el libro encontrado en la adolescencia como un libro filosófico de la soledad del hombre ad portas de la guerra y del nazismo, también del Circulo de Lectores que nos metió en el cuento de la escritura sin que nos llevara al abismo de la desesperación de aquellos. 

Perfecto contradictorio en el que resume dos anotaciones y un tratado de lo que considera su lobo estepario, para escapar de si mismo y sus falsas atribuciones. 

Rechaza todo y ansía todo. Porque se considera de una clase burguesa dentro del mundo que desea destruir. En su espejo solo refleja su introspección. Por lo que sin ambages y lucubraciones elevadas es su concepción autobiográfica, desarrolla su bildungsroman que tanto influenció o dio origen a movimientos existencialistas. 

Técnicamente sus capítulos son muy largos y su acción es de dentro afuera. Por su gran contenido introspectivo que suele resentir a algunos lectores, pero la paciencia de llegar al final es un canto a ese hombre solitario que desde Hobbes no es sólo un lobo, sino innumerables habitantes de esa alma martirizada del siglo veinte con la segunda guerra y el fascismo de su país, hermanada con la montaña y el teatro mágico de su paisano. 

La perniciosa idea de desaparecer con el suicidio (Tema también, de Camus) puede ser reemplazada por el humor y hallar la magia para su teatro interior. 

En mi país, la adopción del humor como necesidad para enfrentar la vida, fue una de nuestras elementales soluciones que vemos reflejada en el texto profundo de Herman Hesse.

La obra pretende ser los humildes apuntes biográficos de un autor que labra su propia bildungsroman, su obra obra de crecimiento. 

Vuelto a sus viejas páginas esa experiencia resuena desde la adolescencia. 

Marco Polo 

Julio 2 de 2023 

Altillo de Vilanova. 

 Bogotá D.C.