VOLVER LA VISTA ATRÁS

Juan Gabriel VÁSQUEZ

 

Un libro para escribir una teoría.

 

 

“Una novela debería ser la biografía de un hombre o un caso y toda biografía de un hombre o un caso debería ser una novela”




 

Vivir en ese mundo donde aún no termina la historia.

Escuchar de labios de alguien los apartes que van a construir ese suceso que tanto nos afectó.

Rearmar los pedazos de una familia, desde su sueño de ver caer al tirano, con la promesas del no retorno al Barcelona siempre rebelde, antifranquista, para admitir que su propio padre era descendiente de una familia militar. 

Y armar con esos personajes una historia que recrea los orígenes patrios en una película que al final es la propia película que no se escribió.

 

Surge de la experiencia del escritor, la sensación de haber escrito una ficción, de no poder crear otra cosa que una novela, pese a que las voces del recuerdo  son las de seres reales. 

 

Una muy buena teoría de lo que es ficcionar  sobre sucesos vívidos, que nos trae Juan Gabriel Vásquez con atrevimiento, para ir eliminado prejuicios sobre este punto del oficio de escribir.

 

Y si han pasado más de sesenta años de esas vidas; cómo las mismas llegaron a incidir, ordenar y dirigir ese nuevo país que nos tocó tratar de cambiar.

 

Al decir que se trata de la historia de Sergio Cabrera, el director de cine y con él la vida de Fausto Cabrera el declamador con su vibrante voz de actor poeta, nos afecta la propia historia, y la de la televisión con su poder frente a las masas desvalidas y movidas a su ritmo.

 

Una familia que por la misma idea antifranquista, con la necesidad de revancha del padre contra la dictadura resuelve viajar a la China de Mao, para que esposa e hijos sean tragados por la vorágine de la teoría socialista y la revolución, para luego trasponer o tratar de copiar la experiencia a Colombia, haciendo que cada uno de sus miembros sean militantes de una revolución que no puede ser Bolchevique, en el origen del maoismo nacional, el EPL, que cuajó muchas otras violencias.

 

Es la idea obsecada de un español que hizo de la actuación y política su vida, y la de su familia parte del elenco y rol.

 

Al final con su muerte, la familia retorna al verdadero rol de la normalidad, ejerciendo de cada elemento, lo que el tiempo del padre y la política les hurtó: El cine, el hogar, el amor.

 

El fin doloroso de la utopía de la revolución socialista en China, que en nada favoreció el anhelo de tener un país en paz.

Es la negación de una teoría, desde las entrañas del dragón, que no pudo uniformar más a los humanos sino en la farsa del poder de un imperio viejo y monstruoso.

 

Porque cual actor, o personaje creado:

 

La interpretación es también parte del arte de la ficciónque el personaje en cuestión sea real o inventado es, en la práctica una distinción inconducente y superflua”

 

Marco Polo

Altillo de Villanova

Febrero 14 de 2022

Bogotá.

 

 

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