Antonio Tabuchi

Sostiene Pereira

 

Un periodista, le cuenta al escritor el suceso de su fugaz enfrentamiento desde un periódico con el dictador Salazar de Portugal.

 

Es un viudo, apocado y católico que escribe la página cultural del Lisboa, un insignificante diario de la tarde en el que casi se callan los sucesos diarios.

 

Por razones de ejercicio cotidiano resuelve contratar de ayudante a un joven, recién egresado que expresa en su tesis pirateada asuntos del alma que llaman la atención al periodista que tiene como obsesión de su temática fundamental la muerte.

El joven huérfano, se vuelve en pocas palabras casi su hijo, desde la nostalgia de no haber concebido uno para aquel hogar raquítico formado con su esposa enferma, que pereciera de tisis.

La novia del forzado ayudante lo hace un osado partícipe de los sucesos de la guerra civil española, buscando militantes para la causa de la libertad.

El joven finalmente es descubierto, torturado y muerto en casa de Pereira que cambiando al bando de los jóvenes, escribe una diatriba de los abusos del dictador por intermedio de la policía política y huye.

 

Lo que llama la atención del cuento no es otra cosa que la utilización de la técnica para contarlo desapareciendo al máximo el narrador, que queda suspendido en la afirmación de que lo que cuenta, lo dice el otro. 

 

Sostiene Pereira y se excluye al máximo.

 

Claro, el autor al parecer tuvo oportunidad de conocer al personaje de carne y hueso, porque el hecho fue real;  y traernos su voz.

 

Es esa oralidad perdida en su recuerdo la que nos presenta el suceso.

 

Lo otro es la eficacia de lo emotivo de interactuar con un joven, al que finalmente cubre con su protección y cobijo económico, sin que sus aportaciones literarias puedan llegar a ser incluidas en el periódico, pero que lo van transformando en un testigo que puede mirar la realidad de las injusticias al fin, y se convierte en un nuevo ser humano crítico y activo denunciante de las aberraciones de la policía política.

 

Son 25 capítulos cortos en que resume y nos trae ese Portugal desde un verano hasta la llegada del otoño oscuro y lluvioso que permite llegar al lector con un sabor apacible sobre su vida inútil transformada ahora, en una rauda actividad militante a favor de la libertad y la verdad desaparecida de los diarios, pero que fue escuchando del fantasma que comenzó a visitarlo como si fuera aquel personaje en busca de autor del que no trae su nombre, como ocurrió además a su paisano Pirandello.

 

 

Marco Polo

Altillo de Villanova

Mayo 9 de 2022

Bogotá D.C.