LA MEMORIA HISTORICA, EL TEMA DE LA FILBO 2.014

Por: Chucho F.

Con una sensación de alegría encuentro hoy, en el Tiempo, que uno de los escritores más promocionado de la actualidad es el encargado del especial sobre la FILBO de Bogotá 2.014.  Y que su artículo trata sobre LA MEMORIA HISTORICA, uno de los tantos temas de la novela de MARCO POLO SALCEDO, el huilense.

 Juan Gabriel Vásquez en su texto, no hace otra cosa que remitirme a ARMAS DE JUEGO, para indicarme que ese es el camino que debe desbrozar la novela de actualidad. La de retomar la “memoria del pueblo” para luchar contra el “negacionismo” o como lo decía el gran maestro Lasso de la Universidad Surcolombiana, el “ninguneo”  o,  “cómo el dinosaurio de Monterroso sigue ahí”.

“Hubo un tiempo feliz en que la memoria era un asunto íntimo. Uno lee a Platón o a San Agustín, a Montaigne o a Proust y se da cuenta de eso con cierta nostalgia. Platón compara la memoria con un bloque de cera en el cual va quedando impreso lo que sabemos o experimentamos; Proust hace una suma de la condición humana en 3.000 páginas sacadas de la lectura de Bergson y de una magdalena mojada en té…”

“En muchos casos, estas ficciones que recuerdan son el único puente que podemos tender hacia el pasado. Y tendría lógica, pues el mundo del pasado es por definición un mundo desaparecido, y un porcentaje del acto del recuerdo será siempre un acto de imaginación”.

Valga lo anterior para, de nuevo, volver a la actualidad de ARMAS DE JUEGO, sobre todo porque se trata de una obra sobre el RECUERDO, sobre la MEMORIA HISTORICA de dos pueblos del Huila, estrechamente vinculados a la historia nacional, por dos fuentes que son las mismas del origen de la guerra en Colombia, por esa época Monseñor Ismael Perdomo Borrero el Giganteño, que lideraba como Arzobispo el poder conservador del siglo veinte y el presidente payanés de Colombia, que vivió en Gigante Huila y que propició la libertad de los esclavos en 1851, separados por un siglo; JOSE HILARIO LOPEZ es quien debe subir al pedestal para que encumbremos el sentido de la libertad de los dos pueblos que como GIGANTE o GARZON, hermanos, han sido desunidos por la guerra fratricida del país, cuyas causas se cuentan  en él libro, y la voz de un niño logra fusionarlos.

Y así lo trae el maestro JORGE GUEBELY, magister de la Sorbona al reseñar el libro:

"La memoria, que tanto nos encadena con la nostalgia, también nos libera con su limpieza. Instrumento utilizado por Proust para componer "En busca del tiempo perdido" . Percibida por Schiller como una guía,"mas valiosa que el genio y la sensibilidad". Borges en la oscuridad de su ceguera, la veía con espléndida claridad: "Somos nuestra memoria, somos ese quimérico museo de formas inconstantes, ese montón de espejos rotos".